El Coaching está muy relacionado con el cambio y la transformación, con la capacidad humana de crecer, alterar comportamientos mal adaptados y generar nuevas acciones satisfactorias.

Para la mayoría de las personas, cambiar viejos hábitos y pautas resulta difícil, aún cuando reconozcan que no le son beneficiosas, o les dificultan la consecución de las metas.

Precisamente, el Coach observa dichos hábitos, abre nuevas posibilidades y presta apoyo durante el proceso de cambio, que, generalmente, resulta bastante complejo.

Por otro lado, hoy en día las empresas afrontan cambios que se producen a un ritmo exponencial, difícil de manejar. El cambio, inunda por completo a todas las compañías y hogares españoles, convirtiéndose en el componente más evidente del entorno.

Muchas estrategias empresariales y corporales actuales son inadecuadas, para adaptarse a un mercado global que cambia a la velocidad de la luz. El mismo razonamiento vale para los prejuicios y principios en los que, desde hace años, hemos basado nuestras vidas y objetivos personales.

Cada vez es mayor el número de compañías y organizaciones, tanto públicas como privadas, que acuden a coaches empresariales para que eles ayuden a navegar entre los cambios y las exigencias constantes del entorno. Y lo mismo pasa con las personas individuales.

El coaching empresarial se puede aplicar a toda clase de negocios y personas, y abarca, desde el coaching ejecutivo cara a cara, individual y personal, hasta el de equipos, en grandes corporaciones y organizaciones.

Definitivamente, el Coaching está asociado al cambio, el cambio implica aprendizaje, y éste no no consiste únicamente en la adquisición de conocimientos, sino que también requiere ser capaz de demostrar estos conocimientos mediante la toma de decisiones y la puesta en marcha de acciones.

El rol del Coach empresarial consiste en observar y facilitar una perspectiva objetiva de las cuestiones y problemas de lo que funciona y de lo que no funciona. Formula preguntas dirigidas a facilitar una discusión de las posibilidades y oportunidades, y orienta y respalda a los individuos a lo largo del proceso de rendimiento y desarrollo personal y organizativo.

El Coaching empresarial es transformador. La formación incide en la capacidad de la gente de hacer un trabajo. El Coaching empuja.